De que son las baterias de los coches electricos

Vehículo eléctrico de batería deutsch

Una batería de vehículo eléctrico (EVB, también conocida como batería de tracción) es una batería recargable utilizada para alimentar los motores eléctricos de un vehículo eléctrico de batería (BEV) o un vehículo eléctrico híbrido (HEV). Suelen ser baterías de iones de litio y están diseñadas específicamente para ofrecer una gran capacidad de carga (o energía) eléctrica.

Las baterías para vehículos eléctricos se diferencian de las baterías de arranque, alumbrado y encendido (SLI) en que están diseñadas para suministrar energía durante periodos de tiempo prolongados y son baterías de ciclo profundo. Las baterías para vehículos eléctricos se caracterizan por su relación potencia-peso, su energía específica y su densidad energética relativamente elevadas; las baterías más pequeñas y ligeras son deseables porque reducen el peso del vehículo y, por tanto, mejoran su rendimiento. En comparación con los combustibles líquidos, la mayoría de las tecnologías de baterías actuales tienen una energía específica mucho menor, lo que suele repercutir en la autonomía máxima totalmente eléctrica de los vehículos.

El tipo de batería más común en los vehículos eléctricos modernos son las de iones de litio y polímero de litio, debido a su alta densidad energética en comparación con su peso. Otros tipos de baterías recargables que se utilizan en los vehículos eléctricos son las de plomo-ácido («inundadas», de ciclo profundo y de plomo-ácido reguladas por válvula), las de níquel-cadmio, las de níquel-hidruro metálico y, con menor frecuencia, las de zinc-aire y las de sodio-cloruro de níquel («cebra»)[1] La cantidad de electricidad (es decir, la carga eléctrica) almacenada en las baterías se mide en amperios-hora o en culombios, y la energía total suele medirse en kilovatios-hora (kWh).

Capacidad de la batería del coche eléctrico

La era del coche eléctrico ha llegado. A principios de este año, el gigante automovilístico estadounidense General Motors anunció que pretende dejar de vender modelos de gasolina y diésel para 2035. Audi, con sede en Alemania, tiene previsto dejar de producir este tipo de vehículos en 2033. Muchas otras multinacionales del automóvil han publicado hojas de ruta similares. La electrificación de la movilidad personal se está acelerando de una forma que ni siquiera sus defensores más acérrimos habrían soñado hace tan sólo unos años. En muchos países, los mandatos gubernamentales acelerarán el cambio. Pero incluso sin nuevas políticas o normativas, la mitad de las ventas mundiales de turismos en 2035 serán eléctricos, según la consultora BloombergNEF (BNEF) de Londres.Esta conversión industrial masiva marca un «cambio de un sistema energético intensivo en combustible a otro intensivo en materiales», declaró la Agencia Internacional de la Energía (AIE) en mayo1. En las próximas décadas, cientos de millones de vehículos circularán por las carreteras con enormes baterías en su interior (véase «La electricidad»). Y cada una de esas baterías contendrá decenas de kilogramos de materiales que aún no se han extraído.

Batería Ev

Aunque todavía queda un largo camino por recorrer -los vehículos eléctricos solo representaron el 3% de las ventas mundiales de automóviles en 2020-, el crecimiento de los VE por fin está subiendo. De 2010 a 2019, el número de vehículos eléctricos en circulación pasó de 17.000 a 7,2 millones. Y esa cifra podría aumentar a 250 millones en 2030, según una estimación de la Agencia Internacional de la Energía.

La creciente demanda de vehículos eléctricos es una buena noticia para limitar las emisiones climáticas del sector del transporte, pero los VE siguen teniendo costes medioambientales. Especialmente preocupantes son los materiales necesarios para fabricar las siempre importantes baterías, algunos de los cuales ya se prevé que escaseen.

«El cambio climático es nuestro mayor y más acuciante desafío, pero hay algunas vías peligrosas que debemos tener en cuenta mientras construimos la infraestructura que nos lleve a un nuevo paradigma de bajas emisiones de carbono», afirma Douglas McCauley, profesor y director de la Benioff Ocean Initiative de la Universidad de California en Santa Bárbara.

Una de esas peligrosas vías es la explotación del fondo marino para extraer minerales como el cobalto y el níquel, muy utilizados en las baterías de los vehículos eléctricos. Hasta ahora, la extracción de estos materiales se ha limitado a tierra firme, pero se están elaborando normas internacionales para la explotación minera de los fondos marinos lejos de la costa.

Producción de baterías para coches eléctricos

¿Cuánto durará la batería antes de que tenga que cambiarla?» es una preocupación muy extendida entre muchos consumidores que compran un coche eléctrico. Pero la cuestión de la vida útil de la batería no es sólo una preocupación del usuario final. Los fabricantes y los importadores también quieren saber si la batería tendrá que ser sustituida en virtud de la garantía del consumidor. Y cuando los responsables políticos de la UE incentivan la conducción eléctrica, su principal preocupación es: «¿cómo evitamos que estas baterías se conviertan en residuos?». Pues bien, parece que hay una solución que ofrece alivio a todas estas preocupaciones: los centros de reparación de baterías.¿Qué papel pueden desempeñar los centros de reparación de baterías para alargar el ciclo de vida de las baterías de los vehículos eléctricos? Descúbralo en este artículo.Los centros de reparación de baterías, en la cima de la jerarquía de gestión de residuos¿Recuerda la jerarquía de gestión de residuos? Se trata de una estructura en forma de embudo que podemos utilizar como guía para tratar las baterías desechadas. La parte superior del embudo muestra las soluciones más deseables (prevención y reutilización), y en la parte inferior encontramos la acción que debe evitarse en la medida de lo posible (eliminación).Los centros de reparación ofrecen una solución en las capas superiores de la jerarquía. Al reparar las baterías, son capaces de prolongar considerablemente su vida útil. Cuentan con un equipo de expertos en alta tensión, certificados para trabajar con baterías de iones de litio.Así es como funcionan: