¿Es difícil cambiar un embrague?
Para muchos entusiastas del automóvil, no hay nada como una transmisión manual. Pisar el embrague y cambiar de marcha es una emoción que una transmisión automática no puede proporcionar. Aunque el embrague está diseñado para ser duradero, es una pieza que puede desgastarse.
Para los no iniciados, un vehículo con una transmisión estándar normalmente cuenta con un pedal a la izquierda del freno, que se conoce como embrague. El conductor debe accionar el embrague para que el vehículo cambie de marcha.
La vida media de un embrague es de entre 20.000 y 150.000 millas. Por suerte, su embrague le avisará con suficiente antelación de que algo va mal. No te quedes a un lado de la carretera con un vehículo que no cambia de marcha. Sigue leyendo para conocer los signos y síntomas de un embrague defectuoso.
Una de las primeras señales que puede notar es que el embrague está blando o esponjoso cuando lo presiona. Mientras conduces, fíjate en cómo se siente el embrague cuando lo pisas. Sabiendo cómo se siente normalmente, sabrás cuándo hay un problema.
Frecuencia de cambio del líquido de embrague
Ser conductor también conlleva algunas responsabilidades. Quizá la más importante sea la de ser un conductor seguro en todo momento. Esto es esencial para su propia seguridad, la de sus pasajeros y la de los demás usuarios de la carretera. Además, si demuestra una conducción segura, puede obtener un descuento en la prima de su seguro de conductor joven.
Otra responsabilidad que tienes como conductor es cuidar de tu vehículo. Los coches son máquinas sofisticadas y caras, y es importante tratarlas con cuidado y respeto si quieres evitar facturas de reparación demasiado elevadas. Conocer tu coche es uno de los factores clave para convertirte en un buen conductor, como mencionamos en nuestros 18 consejos para conductores noveles.
En términos sencillos, el embrague es un dispositivo que pasa la energía de rotación desarrollada por el motor, a las ruedas. Este escenario sólo se aplica a los vehículos manuales, ya que los automáticos no tienen embrague, sólo una palanca de cambios que te permite cambiar entre aparcamiento, marcha atrás, punto muerto y conducción.
¿Cómo funciona la mecánica? Esencialmente, el embrague controla la conexión entre varios ejes de transmisión, uno procedente del motor del coche y los otros conectados a las ruedas. Al fin y al cabo, el motor genera potencia todo el tiempo, pero no siempre se quiere que envíe potencia a las ruedas a la misma velocidad.
Cómo saber si necesitas un embrague nuevo
El embrague es una de las piezas cruciales de nuestro coche. Su principal cometido es conectar el volante de inercia al cigüeñal, que gira a diferentes velocidades, actuando así como separador entre el motor y las ruedas.
Por ejemplo, si tendemos a conducir tirando del embrague o cambiando de marcha sin que el embrague esté completamente levantado, el desgaste será indudablemente mayor. Lo mismo ocurre si tenemos la mala costumbre de dejar el pie izquierdo apoyado en el pedal del embrague. Al hacerlo, levantamos un poco el embrague y éste roza con el volante y el cigüeñal, desgastándose mucho más rápido.
La carretera por la que conducimos también afecta principalmente a la vida útil del embrague. El embrague de un coche que se conduce en ciudad, entre paradas, prioridades y semáforos sufrirá realmente más estrés debido al mayor número de cambios de marcha. En cambio, un coche que sólo se utilice en autopista, durante el mismo número de kilómetros, tendrá un embrague menos desgastado.
Por lo tanto, debería durar aproximadamente cientos de miles de kilómetros. Sin embargo, no es raro tener que cambiarlo a partir de los 50.000 kilómetros o incluso después de unos pocos miles de kilómetros si se conduce muy mal.
¿Es necesario cambiar el embrague al cambiar la caja de cambios
Mucha gente sabe que los coches y camiones tienen embragues y que a veces hay que cambiarlos. Naturalmente, la siguiente pregunta es: ¿cuándo hay que cambiar el embrague? Por desgracia, no hay una respuesta definitiva. Un embrague puede durar entre 48.000 y 161.000 kilómetros, dependiendo del tipo de vehículo, de cómo se conduzca e incluso del clima en el que se conduzca. Los embragues de los coches que circulan en climas cálidos suelen desgastarse antes. La suerte también puede influir.
En lugar de tratar de precisar cuánto tiempo debe durar un embrague, puede ser más seguro decir simplemente que un coche bien cuidado es probable que pase por más de uno de ellos, y centrarse en cómo saber si el embrague necesita ser reemplazado. Nadie quiere sustituir un embrague innecesariamente, ya que hacerlo puede resultar muy caro y difícil, aunque posponer la operación se traduce en una menor eficiencia de combustible, un manejo menos fiable y problemas de seguridad. Por lo tanto, los propietarios de automóviles necesitan saber al menos lo básico de lo que son los embragues, cómo funcionan y qué significan las señales de problemas.